La EMVS rectifica por tercera vez la ejecución del desahucio de una familia en Alto de Extremadura
 10 Feb 2015 Dani Gago 
Madrid, 11 de febrero de 2015. Activistas antidesahucios y miembros de la Plataforma de Afectados por la Vivienda y Suelo Público (PAVSP) y del Grupo de Vivienda de Asamblea Latina, entre otros colectivos, han logrado aplazar esta mañana el desahucio de Emilia, vecina del barrio de Alto de Extremadura, que la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) había fijado para las 09:30 horas de hoy.   La EMVS se ha negado a paralizar el procedimiento tal y como había solicitado la afectada, que ha pedido a la empresa municipal un "plan de pago para la deuda [3.000 €] que se adapte a sus escasas posibilidades e incluya el alquiler social y la reducción de la deuda". Así lo ha explicado Manuel San Pastor, abogado de la PAVSP, que asegura además que "Elvira ha intentado pagar su deuda, pero la EMVS le ha dicho que que ya es tarde".   La Empresa Municipal de Vivienda y Suelo, que no ha suspendido el lanzamiento, sino que lo ha prorrogado hasta el próximo 25 de febrero, alega ahora "conflictividad vecinal" para proceder al deshaucio, algo que la propia presidenta de la comunidad de vecinos negaba ayer ante la EMVS. Se trata, según el abogado, de una "estrategia muy habitual"; "inventan infundios y mentiras para echar a la gente a la calle y vender sus hogares a los fondos buitres", denuncia San Pastor.   Por eso, y a pesar de que el aplazamiento "no permite mucho margen para trámites", tal y como han tratado de explicar los activistas a la Comision Judicial, tanto Emilia como el colectivo antidesahucios se han mostrado dispuestos a "continuar la batalla". El siguiente paso será presentar nuevos escritos por una vía judicial supuestamente agotada pero, sobre todo, negociar con la EMVS que, explica el abogado, "ha reconocido implícitamente una relación contractual con Emilia", así como "su voluntad de pagar y permanecer en la vivienda", al proceder al cobro mensual de un recibo de alquiler de 73 euros.   La de esta mañana era la tercera vez que Emilia se enfrentaba a la ejecución del desahucio, que ya fue paralizado en 2012 gracias a una fuerte presencia vecinal. Desde entonces la familia ha adquirido una deuda que hoy asciende a 3.000 euros y que, según argumenta la EMVS, "está ya fuera de plazo". Los únicos ingresos que percibe Emilia son los 460 euros de la Renta Mínima de Inserción (RMI), de la que dependmbién su hijo, su nuera y sus 3 nietos, de 7, 6 y 3 años, todos residentes en el domicilio.
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