Concentraciones en más de 30 ciudades españolas contra la represión de la protesta social y por la absolución de Carmen y Carlos
28 Jun 2014
Adolfo Luján
Madrid, 29 de junio de 2014. Más de una treintena de ciudades españolas se concentraron ayer en el marco de la ‘Jornada Internacional Antirrepresiva’ en solidaridad con todos los detenidos por participar en protestas sociales y en particular con Carmen y Carlos, condenados a tres años de cárcel por participar en un piquete informativo durante la huelga general del 29M.
Barcelona, Zaragoza, Bilbao o Granada han sido testigos de la protesta, como también Madrid, donde varios centenares de personas se reunieron en torno a la céntrica plaza de Callao para denunciar la represión del gobierno.
La manifestación había sido prohibida por la Delegación de Gobierno de la Comunidad de Madrid, aparentemente sin motivo, pues la organización asegura haberla comunicado en el tiempo y forma exigidos.
A primera hora de la tarde, circulaba el rumor en las redes sociales de que la manifestación pudiera ser desconvocada debido a la denegación del permiso. Pero eso no impidió que cientos de personas se reunieran en Callao para pedir la absolución de Carmen y Carlos, pero también de los 11 detenidos el 19J, de los solidarios antidesahucios imputados y de los detenidos por el 22M o por las protestas de Can Víes. “Es una concentración en defensa de los imputados y condenados simplemente por defender los derechos fundamentales”, explicaba la organización.
“La prohibición de esta manifestación es ilegal”, clamaba uno de los portavoces, “porque se comunicó en tiempo y forma y porque basta con que se comunique”, argumentaba. “Estamos en presencia de un estado de excepción que quiere acompañar por la fuerza la proclamación de un rey que el pueblo no quiere”, insistía.
Al grito de ‘la voz del pueblo no es ilegal’, ‘libertad detenidos por luchar’ o ‘nuestros hijos no son delincuentes’, los manifestantes permanecieron en la plaza de Callao poco más de una hora, ante la mirada curiosa de turistas y viandantes.
La concentración concluyó con la lectura de un manifiesto que denunciaba que “el gobierno intenta acabar con la libertad de expresión” y aseguraba que la concentración-manifestación “era sólo el punto de partida de una lucha por la dignidad”. Después, la organización ha instado a los participantes a abandonar el lugar para “no caer en las provocaciones de la policía”.
Palabras clave en esta historia:
También te puede interesar...