Las autoridades húngaras retienen e identifican en Röszke a los migrantes que tratan de alcanzar Europa
 11 Sep 2015 Belén Lobos Montañés 
Röszke, Hungría. 12 de septiembre de 2015. Uno de los dos campos de ‘retención’ de Röszke, a pocos kilómetros de la frontera húngara con Serbia, cumple las funciones de un campo de registro de los refugiados adonde se los lleva, la mayoría de las veces sin su conocimiento, para proceder a su identificación. A diario, llegan decenas de autobuses repletos de personas, que son sometidas a largas esperas dentro del vehículo antes de acceder al campo.   Muchos de ellos temen que su huella dactilar sea registrada ante la posibilidad de ser retenidos en el primer país de la Unión Europea que han logrado alcanzar o ser deportadas a su país de origen.

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