Víctimas del robo de bebés exigen investigación y justicia ante la Fiscalía General del Estado
 26 Jan 2014 Juan Zarza 
Madrid, 27 de enero de 2014. La Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares (ANADIR) ha convocado esta mañana una concentración frente a la Fiscalía General del Estado en la calle Fortuny 4 de Madrid a la que han acudido unas 100 personas para exigir que se investiguen los casos de presuntos robos de bebés que han sido archivados en su mayoría.   Hacia las 11 de la mañana, los afectados se han reunido allí para leer un comunicado y posteriormente entregarlo en la Fiscalía para “expresar su enérgico rechazo a los archivos masivos de denuncias por parte de los fiscales que investigan los casos” y para “denunciar la falta de ayuda y colaboración por parte de esta institución”. Sobre todo, han querido hacer hincapié en el hecho de que el “Ministerio de Justicia habilitó una oficina para estos casos hace un año, que se ha mostrado totalmente inoperante porque apenas tiene casos” y que “además prometió reuniones todos los meses con los afectados que no se han celebrado ni una vez”. Tanto ANADIR, como SOS Bebés Robados o Adelante Bebés Robados, han denunciado que “se están archivando los casos esgrimiendo la prescripción del delito o la falta de pruebas”. Según los afectados, “el Fiscal General aseguró que estos delitos no prescribirían”. El balance que presentan estas asociaciones es de 4.000 denuncias presentadas, de las cuales el 80% han sido archivadas.   Señalan que “los únicos encuentros de familiares que se han producido han sido gracias a la colaboración de los medios de comunicación, las redes sociales y la movilización incansable de los afectados”. Piden más interés al Gobierno y que se realicen las investigaciones oportunas para “que se haga justicia”.   Virginia López, que pertenece a SOS Bebés Robados, busca a su hermano que nació en 1975 en el hospital de La Paz, ha explicado cómo su madre “fue a pedir su ingreso en tal hospital y ni siquiera consta que diera luz allí” y que además hay una firma falsificada de su padre en el Registro Civil para inscribir a su hermano, al que nunca llegaron a conocer, porque les dijeron que había muerto. Virginia afirma que “es una vergüenza porque hay papeles, hay datos, pero están archivando los casos sin investigarlos” y que su hermano “puede estar hasta en el extranjero”.   Cristina Moracho Martín, de Adelante Bebés Robados, residente en Villalba ha relatado su historia: “Di a luz a un niño sietemesino en un parto domiciliario, estaba sola con una hija de 15 meses. Me llevaron al Clínico de San Carlos y allí no volví a ver a mi hijo. Mientras estaba sola me estuvieron preguntando. Yo tenía 17 años, no estaba casada pero tenía pareja. Mi pareja se había ido a llevar a nuestra hija de 15 meses. Me dijeron que había muerto y que no podía verlo porque se lo habían llevado a enterrar. Después me tuvieron allí retenida 5 días porque yo no me creía que estuviera muerta, hasta le había atado el cordón umbilical. Mi hija ahora tiene casi 31 años, yo a ese niño le habría podido criar igual que a su hermana. Esto es un drama social, es tráfico de bebes, un crimen”.   Además ha afirmado que “hay mucha gente influyente en todo esto y se están protegiendo porque saben que si cogen a uno van a caer todos”. Le pide al Gobierno que “si no hace nada, que dimita y que se ponga gente competente a hacerlo”.

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