Un orgullo ‘trans-feminista, anticapitalista y horizontal’ recorre el centro de Madrid
28 Jun 2014
Adolfo Luján
Madrid, 29 de junio de 2014. Convocadas por la Asamblea del Orgullo Madrid 2014, más de 500 personas procedentes de distintos colectivos de lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersexuales recorrieron ayer por la tarde el centro de la capital para reivindicar los derechos de la comunidad LGTTBIQ.
No se sienten representados por un Orgullo institucional que “mercantiliza sus identidades y orientaciones sexuales”, afirman. Por eso han decidido participar en un acto alternativo a los de la próxima semana –Madrid celebra el Orgullo LGTB 2014 la semana del 2 al 6 de julio– y han escogido para ello una fecha tan señalada como el 28J, que conmemora el levantamiento contra la persecución homosexual vinculado al Stonewall Inn de Nueva York en 1969.
Rechazan la “invisibilización de la diversidad bollera, marica y biciosa y de otras minorías como migrantes, prostitutas o mayores del Orgullo institucional” al que acusan de “venerar al ‘BBVA’: blanco, burgués, varón, adulto, con cuerpo bonito y capacidad adquisitiva.”
Frente a ello, reclaman la “soberanía y capacidad de decisión” sobre sus cuerpos que “el gobierno y el sistema pretenden negar ” y denuncian “la patologización de los cuerpos trans” y un ‘Apartheid sanitario’ que “discrimina a trans y expulsa a mujeres solteras y parejas de mujeres en los programas de reproducción asistida con la excusa de los recortes”, explican.
Acusan además al sistema de “mutilar a los bebés intersexuales para perpetuar el binomio opresivo hombre-mujer” y protestan por “el acoso a las minorías sociales” pero también por los recortes en sanidad y educación porque “el patriarcado y los recortes nos perjudican por igual a todos.”
La marcha, celebrada en ambiente festivo, partía a las siete de la tarde de la madrileña plaza de Antón Martín y ha recorrido al ritmo de una ‘Batucada que entiende’, las principales calles de la capital, pasando por la Puerta del Sol y la Plaza de Chueca, hasta llegar a Alonso Martínez.
Una vez en allí, la lectura de un manifiesto ponía fin a la manifestación. En él reivindicaban un orgullo que “no es un negocio y no está ni estará nunca en manos de políticos ni empresarios”, recordaba el levantamiento de Stonewall y llamaba a personas y colectivos de Lesbianas, Gays, Trans, Bisexuales e Intersexuales a continuar la lucha.
Palabras clave en esta historia:
También te puede interesar...